El Pleno del Ayuntamiento decidió no aprobar la Moción que presentó el Partido Popular a través de su portavoz, Manuel Mínguez, en la que pedía que no se reduzcan las ayudas de la Junta de Comunidades a la Escuela Concertada, ya que el Gobierno municipal aseguró esas subvenciones y, por tanto, la continuidad de los tres centros de estas características que existen en Hellín.

En un primer momento, como ya adelantó ante los medios de comunicación a finales de la pasada semana, el ex alcalde de Hellín exhibió su preocupación acerca del futuro de la Escuela Concertada en el conjunto de la Región y en los centros de San Rafael, Compañía de María y San Rafael, si se congelan, primero; y posteriormente, se eliminan estas ayudas.
Mínguez defendió este tipo de escuela que, además, recordó, cuesta un 50 % que la pública y, por tanto, la libre de elección del centro por parte de los padres y madres de alumnos, y acusó al presidente, Emiliano García Page, de haber cedido a presiones de Podemos «pero, se pone de manifiesto que, cuando se pacta, en ocasiones hay que ceder en algo tan importante, que no debe conocer colores políticos, como la Educación».
El alcalde, tranquiliza
Tanto el propio alcalde de Hellín, Ramón García, como la concejala de Mujer e Igualdad, Rosa María Cuesta, acusaron al PP de haber creado «una alarma tan innecesaria como irreal», porque defendieron la continuidad de las ayudas y de los conciertos que, recordaron, se establecieron con anteriores gobiernos del PSOE, hace más de 25 años.
Además, Cuesta indicó que las escuelas concertadas seguirán, a pesar que la escuela pública, con las ratios que, actualmente, se han establecido, podría absorber a los 1.100 alumnos que, se calcula, estudian en aquéllos colegios, como una afirmación que puso en seria duda el propio Manuel Mínguez.
La concejala de la Mujer sí que contraatacó y acusó al PP de haber recortado en los presupuestos regionales para Educación en un 30 % bajo la gestión de María Dolores de Cospedal, y tampoco se olvidó de otras medidas restrictivas que afectaron a las becas, transporte y comedor escolar o la adquisición de libros de texto.
María Jesús López, portavoz de Ciudadanos, y que se abstuvo en el momento de la votación, defendió una educación pública, de calidad, laica, gratuita y alejada de colores políticos «porque en las escuelas se tiene que hablar de una moral común. Hemos de educar a ciudadanos libres», tras revelar que su experiencia como estudiante la vivió en centros de titularidad religiosa y públicos-como el IES Cristóbal Lozano «en el que mejor me he sentido».