Envuelto en la emoción y los refuerzos, tras catorce años al frente de Cáritas Interparroquial de Hellín, Juan Sánchez confirmó hace unos días su marcha al frente de la Institución que, a partir de este momento, dirigirá Ana Báidez.

Se trata de una voluntaria de Cáritas desde hace seis años y que, consciente, del "gran trabajo» que ha realizado Juan Sánchez, confió en «estar a la altura de la importancia» del cargo y de los proyectos que tiene en marcha la institución.
En la sede de Cáritas en la calle Cuesta de los Caños, Báidez agradeció la confianza que en ella se ha depositado tras recordar que, desde su llegada a la institución, "he hecho mío el espíritu y la forma de trabajar por la dignidad de las personas. Y he podido conocer la realidad del municipio".
Como la única candidatura que, en representación de la Iglesia de La Asunción, se presentó para suceder a Juan Sánchez, la nueva presidenta admitió que, al asumir esta responsabilidad, "debo mantener y cuidar el gran trabajo que se ha realizado y promover otros proyectos para adaptarnos a la realidad social actual".
Momento de un cambio
Por su parte, Sánchez reveló que "había llegado el momento de un cambio", tras recordar sus pasos por Cáritas, desde que formó parte de los equipos directivos de Francisco San José, Emilio Martínez y Auxiliadora Lucas, a la que sustituyó hace catorce años. Y aunque por los estatutos se tendrían que haber renovado cargos cada cuatro años, la continuidad ha sido la tónica generalizada "en esta gran familia que formamos todos".
En su repaso a logros conseguidos en este tiempo, destacó lo que fue la remodelación integral de la anterior casa donde, actualmente, se halla la sede de Caritas, a lo que siguió la puesta en marcha de otros proyectos, como la tienda de ropa de segunda mano, ahora conocida como "Koopera Store", en El Rabal, o el Economato Solidario, en el Centro Social del Carmen, junto a la contratación de personal, como un trabajador social.
Pero ante todo, y bajo la atenta mirada de algunos componentes de la directiva y del que seguirá como Consiliario, Javier Cano, Sánchez resaltó que la mayor gratificación ha sido "saber que, con nuestro esfuerzo y la ayuda de tantas personas y asociaciones, hemos ayudado a familias que lo estaban pasando mal».
Las últimas palabras de agradecimiento fueron hacia su mujer y sus hijas que "siempre han sabido entender mis largas ausencias o los cursos de formación en El Escorial", antes de pedir "perdón a los que haya podido causar, de manera involuntaria, algún daño".