Coincidiendo con el segundo aniversario desde la implantación de la Reforma Labora, la Secretaría de Empleo y Relaciones Sindicales del PSOE se denunció ayer que esta iniciativa del Gobierno del Partido Popular «no sólo no ha dado solución al grave problema del paro en España, y mucho menos en Hellín, sino que lo ha empeorado» hasta dibujar un panorama «desolador, con poco empleo y, el que se crea, muy precario". Los socialistas rebautizaron la Reforma como la del fomento del despido universal.
Una Reforma que, lejos de lo que, recordaron, proclamó el Gobierno del Partido Popular en cuanto a convertirse en el punto de partida para el cambio de ciclo económico, los socialistas la definieron como la del «despido único, disciplinario, discriminatorio, blindado y sin control», así como la del despido «barato, automático, libre y sin causa efectiva real».

El PSOE justificó sus críticas al señalar que, actualmente, existen 1,34 millones de empleos menos, una tasa de paro del 26 por ciento, de los que, abundaron, el 50,8 de los parados llevan más de un año sin empleo, mientras que la tasa de trabajadores con contrato temporal se ha elevado al 24 por ciento y los trabajadores afectados por ERE's han aumentado un 27 por ciento respecto al bienio anterior.
Más datos
Además, desde la referida Secretaría se ha querido recordar que los parados de larga duración no han mejorado con el actual, al advertir que, desde la entrada en vigor de la Reforma Laboral, las familias con todos sus miembros en paro han pasado en Castilla-La Mancha de 77.500 a 89.100, y cerca de 125.000 desempleados ya no perciben ningún tipo de prestación o subsidio.
La oposición tampoco pasó por alto que «gracias» a esta Reforma se contabilizan 2.000 empresas menos inscritas en la Seguridad Social, que se traduce en que el número de trabajadores afiliados se ha desplomado un 8 por ciento, con casi 50.000 menos; unas cifras que se traducen en pérdida de población activa y ocupada en la Región «donde muchos ciudadanos se encuentran situación de exclusión social».
En conclusión el PSOE indicó que la Reforma Laboral ni ha creado empleo ni ha logrado frenar su destrucción, e insistieron en denunciar que ha empeorado las condiciones de trabajo del conjunto de los empleados, disminuyendo la estabilidad en el empleo y la calidad del mismo, por lo que se atrevieron a pedir su retirada.