El secretario provincial de la Coalición de IU, Javier Morcillo, se unió ayer a la corriente de críticas que se han vertido tras la decisión del Consejo de Gobierno, en funciones, de la Junta de Comunidades, de autorizar un decreto por el que, en un plazo de 20 días, se podría producir la reconversión de 862 hectáreas de secano en regadío que, avisó, multiplicará por diez el valor de las futuras tierras, con la nueva catalogación, en lo que calificó se trata de «un pelotazo en toda regla y una verdadera tomadura de pelo».

En las dependencias de la Casa de la Cultura, Morcillo reconoció que, durante muchos años, estas aguas han estado sin un uso adecuado, aunque reivindicó la mociones que el PSOE e IU han presentado en los últimos meses, con el fin de respaldar las inquietudes y necesidades de los más de 350 agricultores de Agramón, La Horca y Minateda que se verán afectados por este Decreto, avisó.
Además, el concejal de IU anticipó que el Decreto de la polémica no solucionará los problemas que padecen los agricultores de la zona Sur de Hellín, al advertir que presentan graves e históricos problemas de salinidad en las aguas para el correcto desarrollo de los cultivos, por lo que insistió en criticar el apoyo a los grandes terratenientes, tras recordar que, entre los beneficiarios con la medida, se halla la familia de una diputada nacional por el Partido Popular.
Acciones legales
Pero en medio de lo que consideró una medida ilógica y sin sentido, para Morcillo «especialmente grave» fue el momento en que se produjo la aprobación del Decreto, en peno traspaso de poderes de la Junta de Comunidades que, en el futuro, presidirá el socialista, Emiliano García Page, «que, perfectamente, si todo está en regla, en unas semanas se podría haber dado una solución a lo que se está reivindicando. Para tanta celeridad», se preguntó.
Morcillo intuyó acciones legales de los agricultores de la zonas afectadas que ya podrían estar preparando un contencioso-administrativo, y avanzó la intenciones de IU de trasladar este tema al Parlamento nacional «para que se conozca por todo el mundo lo que está sucediendo con los agricultores hellineros».